Como muchas de las personas empleadas en la propia Google, vemos con suma preocupación que, según informes, la empresa esté desarrollando una nueva aplicación de motor de búsqueda censurado para el mercado chino.La dirección de la empresa, en cambio, no ha respondido públicamente a la preocupación expresada en relación con el proyecto Libélula, alegando que no va a hacer ningún comentario acerca de una “especulación sobre planes futuros”
- ratificar el compromiso que adoptó la empresa en 2010 de no proporcionar servicios de motor de búsqueda censurados en China;
- revelar su postura sobre la censura en China y las medidas de protección que, en su caso, está adoptando frente a las violaciones de derechos humanos relacionadas con el proyecto Libélula y el resto de sus ofertas de aplicaciones móviles chinas;
- garantizar la protección de quienes denuncien irregularidades y de las demás personas empleadas en la empresa que alcen la voz cuando vean que incumple sus compromisos con los derechos humanos.
[7][8][9]Firman esta carta las organizaciones siguientes:
Firman esta carta a título personal (afiliciación indicada sólo con fines de identificación):