“Es un resultado excelente. El informe ha sido aprobado ya por una abrumadora mayoría de miembros del Parlamento Europeo de todos los grupos políticos, por lo que envía una señal muy poderosa –ha manifestado Nicolas Beger, director de la Oficina de Amnistía Internacional ante las Instituciones Europeas–- Hemos estado haciendo campaña para que se preste atención urgente a este asunto desde que se publicó el último informe, en 2007. Pero queda mucho por hacer. Ahora tenemos que ver medidas tangibles de los diversos gobiernos y el fin de los intentos de eludir su responsabilidad.”
Amnistía Internacional lanzó la campaña Abrir la verdad en Europa coincidiendo con las etapas finales del proceso de aprobación de informe. En el marco de ella, recientemente se entregó una petición con miles de firmas a Martin Schulz, presidente del Parlamento Europeo. Ningún país de la UE ha cumplido todavía la obligación jurídica de realizar una investigación completa y efectiva sobre su participación en los programas de la CIA. Pese a la nueva información que ha publicado esta semana Reprieve sobre los vuelos de entrega con destino a Lituania y procedentes de allí, las autoridades de Vilna se niegan todavía a reabrir una investigación criminal sobre dos lugares secretos de la CIA establecidos allí en 2002 y 2004.
El informe se centra en los tres países europeos que se sabe o se cree que acogieron lugares secretos de detención de la CIA, a saber: Lituania, Polonia y Rumania. En Polonia se han hecho limitados avances en una investigación que sigue realizándose sobre una prisión secreta de la CIA, pero el fiscal se ha negado a mantener debidamente informadas a las partes o a la opinión pública. Rumania ha negado rotundamente toda participación en los programas de la CIA, incluso en el caso de las denuncias creíbles sobre la existencia de una prisión secreta de la CIA allí, y rehúsa seguir investigando.
Aunque la información y los datos sobre los vuelos que se han publicado entre 2011 y 2012 implican claramente a Dinamarca y Finlandia, ambos gobiernos se niegan a realizar una investigación acorde con los derechos humanos. En julio de este año, Finlandia rechazó la recomendación, formulada tras someterse al examen periódico universal de la ONU, de que llevara a cabo una investigación completa sobre su participación en el programa de entregas, procesara a los responsables e indemnizara a las víctimas.
En el informe se insta a los países de la UE a que realicen investigaciones completas y efectivas sobre la colaboración con la CIA en el establecimiento de estos lugares, donde se torturaba y sometía a otros malos tratos a los detenidos. Amnistía Internacional continuará buscando información sobre posibles análisis forenses de los lugares, que pueda indicar si se recluyó allí a alguien. Los tres gobiernos niegan, sin mostrar públicamente ninguna prueba, que hubiera alguien detenido en secreto en su territorio.
