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Arabia Saudí, a punto de alcanzar las 100 ejecuciones en lo que va de año

Hoy se cumplen dos años desde que Ali al Nimr, detenido tras tomar parte en unas protestas contra el Gobierno, fue condenado a muerte. © Particular.
Arabia Saudí habrá ejecutado a más de 100 personas en los primeros seis meses de este año si las ejecuciones continúan al ritmo actual, ha dicho hoy Amnistía Internacional. Hasta ahora han sido ejecutadas 94 personas en lo que va de año, más que en el mismo periodo del año anterior.
En 2015 fueron ejecutadas en Arabia Saudí al menos 158 personas, la cifra más alta desde 1995.
“El pronunciado aumento de las ejecuciones resulta aún más terrible dadas las numerosas deficiencias del sistema de justicia de Arabia Saudí, que hacen que sea totalmente habitual que se condene a gente a muerte en juicios sumamente injustos. Las autoridades saudíes deben dejar de basarse en esta forma de castigo cruel e inhumano y establecer de inmediato una suspensión oficial de las ejecuciones", ha dicho James Lynch, director adjunto del Programa Regional de Amnistía Internacional para Oriente Medio y el Norte de África.
Las ejecuciones en Arabia Saudí han aumentado drásticamente desde hace dos años y esta terrible tendencia no da muestras de invertirse
James Lynch, director adjunto del Programa Regional de AI para Oriente Medio y Norte de África
El caso de Ali al Nimr, de 21 años, condenado a muerte por "confesiones" que, según afirma, le extrajeron bajo custodia, es un ejemplo evidente del uso arbitrario de la pena de muerte tras actuaciones que vulneran abiertamente las normas internacionales de derechos humanos.
Hoy se cumplen dos años desde que Ali al Nimr, detenido tras tomar parte en unas protestas contra el Gobierno, fue condenado a muerte por un tribunal especial de seguridad y antiterrorista por una serie de delitos, tales como atacar a las fuerzas de seguridad y cometer un robo a mano armada. Tenía sólo 17 años cuando lo arrestaron. El derecho internacional de los derechos humanos prohíbe el uso de la pena de muerte por delitos cometidos por personas menores de 18 años.
“Ali al Nimr lleva ya dos años en espera de ejecución. En lugar de obligarlo a pasar un día más en esa situación, las autoridades saudíes deberían anular su condena y ordenar de inmediato un nuevo juicio que cumpla las normas internacionales sin recurrir a la pena de muerte", ha dicho James Lynch.
Otros dos jóvenes, Abdullah al Zaher y Dawood al Marhoon fueron condenados a muerte pocos meses después que Ali al Nimr, por delitos similares, y también afirman que los torturaron para hacerlos "confesar".

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