Estados Unidos
Barack Obama
El presidente estadounidense debe explicar claramente que Estados Unidos ha aprendido de los errores del pasado, cuando apoyó a gobiernos como los de Egipto y Túnez, cuyas promesas de ‘estabilidad política’ estaban basadas en la represión y los abusos contra los derechos humanos en gran escalaMalcolm Smart
La administración estadounidense ha condenado con razón los graves abusos cometidos por las fuerzas del coronel Gadafi en Libia y por el gobierno de Asad en Siria, así como la continua represión de Irán.
Ha sido menos explícito y efectivo a la hora de abordar las actuales campañas de represión de Bahréin y Yemen o de presionar a las autoridades saudíes sobre la necesidad de cambo, dando así la impresión de que Estados Unidos da un trato especial a sus aliados y amigos, independientemente de las violaciones de derechos humanos que cometan.
El presidente de explicar claramente que el gobierno de Estados Unidos se compromete a promover la libertad, la justicia y la rendición de cuenta con amigos y enemigos por igual.
No hay que ‘ponérselo fácil’ a gobiernos como los de Bahréin y Yemen mientras intentan reprimir las manifestaciones y las peticiones populares de cambio; asimismo, el gobierno israelí debe saber que se le exigirán responsabilidades aplicándole mismo rasero que a los demás Estados para garantizar que se hace justicia y se rinden cuentas.
