Yulia Tsvetkova es una joven artista y activista rusa de Komsomolsk del Amur (ciudad del extremo oriental de Rusia), que desde marzo de 2019 sufre una campaña homófoba y machista por defender los derechos de las mujeres y las personas LGBTI.
Está acusada de cometer un delito de “producción y difusión de material pornográfico” a raíz de unos dibujos de mujeres reales que publicó en las redes sociales como parte de su activismo. El juicio penal comenzó el pasado 12 de abril y se enfrenta a hasta seis años de cárcel. Ante la desesperada situación en la que se encuentra, Yulia anunció el 1 de mayo una huelga de hambre, exigiendo celeridad en su proceso, la personación de un defensor público y la apertura del juicio, ya que actualmente las vistas se celebran a puerta cerrada (tampoco hay prensa).
Uno de los dibujos realizados por Yulia Tsvetkova junto con el dibujo de la artista Vera Yin Yang
Lamentablemente, desde que se inició el proceso Yulia ha sido objeto de ataques homófobos de distintas personas, y de acoso y amenazas por teléfono, en redes sociales y por correo. Además, sufrió acoso por parte de la policía rusa durante más de un año, incluyendo una detención arbitraria, registros en su domicilio y su lugar de trabajo, sometimiento a un examen psiquiátrico, y un arresto domiciliario de casi cuatro meses durante el que no pudo recibir la atención médica que necesitaba.
Con anterioridad, en diciembre de 2019 fue declarada culpable de cometer una infracción administrativa, por “propaganda de relaciones sexuales no tradicionales entre menores”, y fue multada con 50.000 rublos (780 dólares estadounidenses) por ser administradora de dos comunidades LGBTI en línea en la red social rusa VKontakte.
Y en enero de 2020 se inició una nueva actuación administrativa en su contra por publicar en las redes sociales su dibujo “La familia es donde está el amor. Apoye a las familias LGBTI”, que representa a dos parejas del mismo sexo con hijos e hijas. Por este hecho, Yulia fue declarada culpable en julio de 2020, siendo de nuevo multada. En paralelo, ese mismo mes, se iniciaron por tercera vez actuaciones administrativas por el mismo tipo de infracción.
Dibujo en apoyo de las familias LGBTI de Yulia Tsvetkova y por el que fue multada
Como puede verse, Yulia es víctima del aumento de la LGBTIfobia en Rusia en los últimos ocho años. En 2013, el Parlamento ruso aprobó casi por unanimidad la conocida como “Ley de Propaganda Homosexual” (considerada discriminatoria por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos en 2017), que prohíbe la promoción entre menores de “relaciones sexuales no tradicionales”, y que, en la práctica, ha dado lugar a que en los medios de comunicación, los espacios culturales o las redes sociales no se pueda hablar de forma positiva de orientaciones sexuales que no sean la heterosexualidad.
La deriva discriminatoria de Rusia ha llevado a que los delitos de odio se hayan duplicado y no exista reproche jurídico en la legislación rusa hacia este tipo de crímenes. El acoso escolar o laboral, los insultos en redes sociales, las agresiones de grupos radicales a las personas LGBTI y el desamparo ante la policía a la hora de denunciar son habituales en Rusia.
Como triste colofón, recientemente Rusia ha redefinido en la Constitución el matrimonio como la “unión entre un hombre y una mujer”, impidiendo el matrimonio homosexual y, por ende, la adopción.
Respecto al machismo, Yulia ha declarado en entrevistas a los medios que los policías y los jueces de Rusia (en especial, de Komsomolsk del Amur) son en su mayoría hombres que están acostumbrados a una visión sexualizada del cuerpo femenino, debido a que es habitual la publicidad con mujeres semidesnudas o eslóganes sexistas. En consecuencia, cuando ven un cuerpo que no está listo para el consumo lo consideran un desafío contra su “normalidad”.
En apoyo y defensa de su lucha, desde Amnistía Internacional España hemos recogido más de 13.000 firmas para solicitar al Fiscal de Komsomolsk del Amur el fin de los procesos penales y administrativos abiertos contra Yulia.
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Reto en instagram
Asimismo, la artista Vera Yin Yang (@ vera_ying_yang) inició el pasado 26 de marzo un reto en Instagram (#freeyuliatsvetkova) en el que pedía a sus seguidoras dar difusión al caso de Yulia, dibujando y compartiendo el cuerpo de la mujer basado en las ilustraciones de Yulia, y solicitaba firmar la petición de Amnistía Internacional. La campaña fue un éxito y durante semanas distintas artistas estuvieron compartiendo sus dibujos de mujeres reales y vídeos de apoyo a Yulia.
Confiamos en que la presión ejercida por Amnistía Internacional tenga el efecto que deseamos y Yulia sea absuelta, a fin de que pueda seguir defendiendo los derechos de todas las mujeres y las personas LGBTI de Rusia.
