En Irán, la violencia contra las mujeres y la discriminación son endémicas. Y, en este marco, las mujeres defensoras que se atreven a alzar su voz sufren una represión constante. Reiteradamente sufren represalias por las actividades que realizan contra la pena de muerte, a favor de los derechos humanos de las mujeres, por exigir verdad, justicia y reparación para las víctimas de ejecuciones sumarias o desapariciones forzadas o por promover la educación de las minorías.
Si eres mujer y no te callas, te espera la cárcel.
Una mujer camina junto a un mural en el centro de Teherán, Irán, el miércoles 3 de enero de 2018. Decenas de miles de iraníes participaron en manifestaciones progubernamentales en varias ciudades de todo el país ese día para calmar los nervios tras una semana de protestas y disturbios que dejaron al menos 21 muertos. © Foto AP / Ebrahim Noroozi
Atena DaemiEl juez me dijo que mi oposición al uso del velo equivalía a oponerme a normas claramente establecidas en el Corán, que había insultado el carácter sagrado de la religión y que mi sentencia debía ser la pena de muerte.”Mariam Akbari MonfaredRuhie Safajoo“LAS mujeres de Irán que desafían de forma pacífica el uso obligatorio del velo han sido objeto de detenciones, campañas difamatorias en los medios de comunicación, acusadas de “insultar al islam” e incluso han recibido amenazas de muerte.”
Antonio Cámara