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Pedro Sánchez: El objetivo no es repatriar sino garantizar los derechos y el bienestar del menor

El viernes 13 de agosto el Ministerio de Interior comenzó a devolver a menores de edad no acompañados desde Ceuta a Marruecos, llegando a realizar al menos 55 repatriaciones de niños en las que se ignoraron sus derechos.

El retorno al país de origen sólo es una solución duradera aceptable cuando es en el interés superior del niño, una vez realizada una evaluación individual y específica, viendo en cada caso a qué niño/a afecta y qué es lo mejor para su situación. En cambio se incumplieron sus derechos a ser escuchados para tener en cuenta su situación, tener acceso a representante legal y abogado, o conocer previamente las decisiones que les afectan.

La justicia ordenó suspender estas expulsiones, y el pasado 25 de agosto el Juzgado de Primera Instancia de Ceuta decidió mantener la paralización de las devoluciones de niños y niñas de Ceuta a Marruecos al no cumplir la ley y vulnerar los derechos de los niños.


Sin embargo el plan del gobierno central y el gobierno de Ceuta es poner los medios que sean necesarios para llevar a cabo el retorno de estos menores a Marruecos en el menor plazo posible.

Los menores migrantes no acompañados son niños y niñas, con derechos que debemos proteger. El objetivo no puede ser el retorno de los menores no acompañados sino garantizar y respetar sus derechos y bienestar.

Es imprescindible que el Gobierno se coordine con las Comunidades Autónomas para facilitar traslados y garantizar una adecuada atención a los más de 700 menores no acompañados y así evitar la saturación del sistema de protección en Ceuta.


Pedro Sánchez tiene en su mano suspender de manera inmediata las repatriaciones de menores no acompañados. Por favor, firma y pídele que lo haga. La seguridad de estos niños y niñas está en juego.

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