- Proteger a los trabajadores de atención de la salud y a los proveedores de servicios
- Abordar el impacto desproporcionado sobre las mujeres
- Aplicar un marco de derechos humanos para proteger la seguridad, la dignidad y las libertades de las comunidades afectadas
- Garantizar el apoyo para la recuperación a largo plazo de los Estados afectados
casos de ébola en los Estados de África occidental de Guinea, Sierra Leona, Liberia, Nigeria y Senegal, así como en la República Democrática del CongoLiberia La respuesta internacional
las obligaciones en materia de derechos humanos incluyen la obligación de cooperación y asistencia internacional, incluso en lo relativo al derecho a la salud.crisis del ébolapeticiones de ayuda de los países afectados o de las Naciones Unidas (ONU)Todos los países que puedan responder deben hacerlo con la mayor prontitud posible.Protección de los trabajadores de atención de la salud y de los proveedores de servicios
Más de 300 trabajadores y trabajadoras de la salud se han infectadoEl apoyo de la comunidad médica internacional es vital, y personal médico extranjero se ha unido a sus colegas en primera línea, a veces con gran costo personalAunque la asistencia internacional debe conceder prioridad a las necesidades urgentes, también debe llegar para la reconstrucción a largo plazo de los sistemas de saludAbordar el impacto sobre las mujeres
por qué las mujeres son más vulnerables a contraer la enfermedadAplicar un marco de derechos humanos para proteger la seguridad, la dignidad y las libertades de las comunidades afectadas
Las cuarentenas, que restringen el derecho a la libertad de circulación, sólo pueden estar justificadas en virtud del derecho internacional si son proporcionadasLa policía tiene un papel importante que desempeñar a la hora de controlar la propagación de la enfermedad y de garantizar la seguridad públicaGarantizar el apoyo para la recuperación a largo plazo
deben llegar nuevos recursos de la comunidad internacional –a través de las agencias de la ONU y del compromiso debidamente coordinado de los donantes– y no sólo una reasignación de los fondos para ayuda existentes.