Atena Daemi, defensora de los derechos humanos por quien llevamos tiempo trabajando necesita tratamiento médico urgente. Las autoridades de la prisión de Evin se niegan a hospitalizarla.
Atena es conducida a la prisión de Evin para cumplir una sentencia de 7 años de prisión. © Center for Human Rights in Iran
“La negación deliberada de tratamiento médico a una persona cuyo estado de salud es crítico es flagrantemente ilegal y puede constituir tortura. Al negarse a trasladar a Atena Daemi al hospital, las autoridades iraníes están dañando su salud y poniendo potencialmente su vida en peligro”Magdalena Mughrabi, directora adjunta de Amnistía Internacional para Oriente Medio y el Norte de África.
“El tremendo absurdo de estas condenas y las prolongadas penas de prisión reflejan hasta qué extremos es capaz de llegar el poder judicial de Irán para ahogar la libertad de expresión.”
Amnistía Internacional